Segovia siempre emociona (4º)

MONASTERIO DE SAN ANTONIO EL REAL

Cuando llegué, el otoño acariciaba las piedras de este sorprendente Monasterio

antiguo palacio del rey Enrique IV, rey de Castilla, de la dinastía de los Trastamara, que vivió en Segovia desde los cuatro años ...

. .."y poseía una finca denominada El Campillo con un pabellón de caza que le donó su padre, el rey Juan II en 1440, al cumplir los 14 años y nombrarle Señor de Segovia. Él la llamaba "mi Segovia" con toda propiedad y decía "que era la ciudad más bella del mundo" y se sentía un segoviano más"

Enrique IV trasladó a los frailes franciscanos observantes y los instaló en el que era su pabellón de caza y construyó de nueva planta el convento y, como era gran admirador del arte mudéjar, nos legó una nunca vista serie de artesonados mudéjares, una joya increíble que, no entiendo el motivo, queda injustamente mermada en la pobre descripción que se lee a su entrada

Porque ¿cómo se puede denominar "muestra" a este impresionante artesonado que corona todo el claustro...??


La verdad es que todo es una pura sorpresa desde que traspasas el umbral



y entras en la iglesia, por la nave lateral, pues a la muerte del rey, su hermana por parte de padre, Isabel la Católica, dispuso que los frailes se fueran a otro convento y las Clarisas que estaban ubicadas en el centro de la ciudad vinieran aquí...La reina mantuvo el nombre de San Antonio como patrono del Monasterio, pero le añadió el título de "Real", y el Coro bajo y el alto de las religiosas se situó a los pies del templo cambiandose el primitivo lugar la entrada


Así el barroco Altar Mayor, entre cortinas de damasco, queda a nuestra izquierda cubierto, en pleno contraste, por un magnífico artesón mudéjar tallado en madera de pino de Valsaín, como todos los del Monasterio

Y frente a mi, sorprendida visitante de este solitario templo (¡ni un sólo "turista" para ver esta maravilla!) un original retablo de taller del s. XV de Bruselas, en madera de nogal, representando toda la pasión de Cristo, como si de un pequeño teatro se tratase con multitud de figuras (más de cien he leído posteriormente) con gran detalle y movilidad



En unas obras que se efectuaron en el 1730, para elevar la nave central y darle más luz ( cargándose de paso otro artesonado mudéjar) fue trasladado desde el presbiterio y embutido en este retablo barroco


Conducida por una entusiasta guía que me transmite su admiración por todo lo que me va mostrando, recorro fascinada la Sacristía, el impresionante claustro con su capillas y los tres pequeños retablos que se transportaban en los viajes, verdaderas obras de arte talladas en tierra "de pipa" en los talleres de Utrecht




Y contemplo tal variedad de artesonados fantásticos



que ni mis ojos ni mi pequeña máquina son capaces de reproducir en todo su esplendor





También salimos al jardín interior y allí percibo como es realmente este claustro, ya que en el XVII se cerró a causa del frío y afortunadamente ese cerramiento ha contribuido a conservar su artesonado

Es gótico-mudéjar con su espadaña, su piedra calada y su ladrillo...la fuente central y los cuatro rios del Paraíso que parten de ella...

Cuando salgo del Monasterio me hago el propósito de ser "pregonera" de sus bellezas por donde quiera que vaya...y de regresar por supuesto porque un solo rato no basta para asimilar tanta belleza.


Además tengo que visitar sin falta el hotel recientemente construido en terrenos del convento, llamado "Hospedería San Antonio el Real" donde, según he leído en el sencillo y oportuno librito (sin nombre de autor) que he comprado en el Monasterio, se ha recuperado otro claustro Isabelino, el de la Vicaría, además de algunas techumbres mudéjares con la heráldica de los Reyes Católicos

La ubicación del Monasterio es en la calle San Antonio el Real, nº 6, 4004 Segovia, telef. 921 42 02 28. Justo en el ángulo inferior derecho de este plano...que señala el itinerario seguido por el Acueducto que, justo aquí, se inicia.


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