jueves, 28 de julio de 2011

Casas Mágicas: La Casa de Zuloaga.


LA CASA MÁGICA DE IGNACIO ZULOAGA EN ZUMAIA




Muchas veces los recuerdos se van enlazando como las cerezas del verano...Eso me pasa a mí ahora con las Casas-Museo que he ido visitando y que luego se van alejando en la memoria...Pero basta que tires de una para que salgan poco a poco las demás y también aquellas que aún no conoces pero que siempre has tenido deseos de visitar...



En esta ocasión rescato otra Casa-Museo que visité varias veces hace unos pocos años y que me dejó un gran recuerdo. Se trata de la casa familiar de Ignacio Zuloaga que se encuentra en Zumaia ese precioso pueblo de la costa vasca.


Llegando desde Zarautz, el camino por la costa por Getaria y pegado al mar es encantador, a la entrada de Zumaia se encuentra el Museo…Es un lugar idílico



En el año 2000 la Fundación BBVA patrocinó en su sede de Madrid (Paseo de la Castellana ) una Exposición titulada "De Goya a Zuloaga. La pintura española de los siglos XIX y XX en The Hispanic Society of América", con unos 60 espléndidos cuadros todos de autores españoles, cedidos por la citada Hispanic Society de New York. Así nos enteramos de que un americano llamado Archar Milton Huntington (1870-1955) se deslumbró por todo lo relacionado con España cuando, siendo un niño de 10 años, leyó un libro que contaba una historia sobre los gitanos en España y, a partir de ahi y cuando se hizo mayor, toda su ilusión y su fortuna, inmensos ambos, los puso a disposición de conocer y coleccionar todo lo relacionado con el Arte español: cuadros, esculturas, muebles, libros (más de 260.000 libros existen en su biblioteca), manuscritos inéditos etc. En 1908 se inauguró oficialmente el primer edificio de la Hispanic Society of América


Los mejores pintores de aquel tiempo plasmaron, por encargo suyo, los personajes, los paisajes y la vida de los pueblos y las ciudades de España... una cultura y una forma de vida que él quería que nunca se perdieran y que fueran conocidas por sus compatriotas. Especialmente conectó con Sorolla con quien llegó a establecer una gran amistad y fue quien le puso en contacto con otros pintores y le aconsejó para sus adquisiciones artísticas... Anglada Camarasa, Benedito, Beruete, Fortuny, Goya, López Mezquita, Raimundo y Ricardo de Madrazo y Garreta, y Federico de Madrazo y Kuntz, Joaquín Mir, Nonell, Pinazo, Rusiñol, Sorolla, Sunyer...y muchos más, estuvieron presentes en aquella memorable exposición...



Como lo estuvo Zuloaga, otro de estos pintores extraordinarios admirado por
Huntington. Ignacio nació en 1870 en Eibar, el país del acero, se crió influenciado  por las técnicas del taller de espadero damasquino de su padre, Plácido, y por las de su famoso tío Daniel, ceramista genial,  y  se dio a conocer como pintor en Madrid, en la Exposición Nacional de 1887. 

En 1889, pintó en Roma, un cuadro titulado El forjador, como un homenaje a la artesanía paterna. En 1890 llega a París y conoce a Rusiñol, junto al que descubre la figura del Greco adquiriendo dos cuadros suyos: La Magdalena y San Pedro que son llevados triunfalmente por las calles de Sitges hasta ser depositados en la casa (..y también actual Museo) de Rusiñol en esta villa.  

En 1893 se instala en Sevilla y allí empieza una de sus característica etapas, la de las “gitanas”. En 1897 y 98 es premiado en la exposición nacional de Barcelona y esto es como el inicio de todos los premios y reconocimientos internacionales que le trae el nuevo siglo, pues no sólo Europa, sino América (New-york, Chile, Buenos Aires...) se rinden a sus pinceles y a sus temas de paisajes, bodegones, retratos o escenas costumbristas...En el cénit de su fama crea en Zumaya su casa-museo “Santiago-Etxea” y en su capilla, una Ermita del Camino de Santiago por la costa vasca, instala el Greco que más le gustaba de los que había ido adquiriendo, “Visión del Apocalipsis”... que más tarde irá a parar a EEUU.


En mis visitas siempre me ha impresionado muchísimo una Dolorosa  que está en esta pequeña Ermita... para mi es completamente distinta a otras Dolorosas... La guía nos explicó que la modelo fue una mujer del pueblo que acababa de quedar viuda de un pescador y era madre de siete chiquillos...

Hacia 1919 Zuloaga decide poner taller en Madrid, primero en el Paseo de Rosales 19 y luego en la Plaza de las Vistillas (donde precisamente murió en 1945)
En la Plaza de las Vistillas está la casa donde pintó y falleció Zuloaga...Una gran oportunidad, hasta ahora desaprovechada, para que Madrid mostrara un íntimo Museo de un pintor tan universal




Zuloaga viajó mucho a Granada, a conversar en la Taberna del Polinario con sus grandes amigos, Falla, Lorca, Fernando de los Ríos... Y participó muy activamente en la celebración del 1er. festival de Cante Flamenco de Granada en el Corpus de 1922.


Su casa de Zumaia está en un rincón de paz, de arte, de naturaleza... nadie amante de la belleza deberia perdérsela... Y dentro, en lo que fue su Estudio, está su colección privada, tanto de sus propios lienzos como de piezas exquisitas que fue reuniendo como experto coleccionista a lo largo de su vida... De El Greco, de Goya, de Zurbarán, de Vicente López, de Luis Morales... y también esculturas de su gran amigo Rodin y un impresionante Cristo crucificado de su también gran amigo Julio Beovides, escultor de Zumaia.


Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

miércoles, 20 de julio de 2011

Casas mágicas: La casa de Garcia Lorca



LA CASA MÁGICA DE FEDERICO GARCIA LORCA: LA HUERTA DE SAN VICENTE EN GRANADA




En estos días de tan tristes recuerdos no puedo por menos que evocar la última
casa familiar que habitó Federico García Lorca en Granada antes de ser asesinado.

En 1925 compró el padre de Lorca una Huerta, en las afueras de Granada, y la llamó de San Vicente en homenaje a su esposa, y colocó una hornacina de San Vicente Ferrer en la puerta. Eran 36 marjales, 2 hectáreas de tierra... y era un paraíso, rodeada de la Vega y por detrás la ciudad coronada por la Alhambra y el Generalife...Federico lo adoró y era su refugio favorito para descansar pero también para trabajar como cuenta numerosas veces en su correspondencia




Hoy está dentro de la ciudad pero entonces estaba muy retirada... Saliendo de Puerta Real y tomando la Calle Recogidas (que tomó este nombre por el Beaterio que en ella se encontraba de "Las Recogidas de Santa María Egipciaca" donde en régimen carcelario se recogía a las prostitutas y donde se llevó presa a Mariana Pineda) se llega a la de Solarillos de Gracia donde entonces se terminaba Granada y empezaba la Vega y las Huertas... Muy cerca estaba la Placeta de Gracia, ya en el mismo borde de la ciudad, y allí estaba el Seminario a 400 m. de la Huerta de San Vicente, de modo que su campana se oía allí perfectamente, incluso las de la Catedral, y estos sonidos fueron muy añorados por Lorca cuando estuvo en New York

He marcado en el plano el itinerario desde Puerta Real, corazón de la ciudad, hasta la Huerta.
Pinchar para ampliarNada queda de aquel esplendor... las calles se suceden sin belleza y toda la Huerta se ha convertido en un parque moderno... La Huerta del Tamarit, donde vivían los tíos de Lorca, de tan buenos recuerdos para él quedaba al otro lado de lo que ahora es la carretera de Circunvalación y hace mucho que desapareció... Las barbaridades urbanísticas han tapado todo vestigio de aquellas maravillosas vistas de Granada y los colores y olores que la rodeaban.

De todas formas la visita a la Huerta de San Vicente es una pura emoción...Su hermana Isabel (fallecida en el 2002), dirigió la decoración para que todo fuera igual que estuvo...¡y hasta están los tapetitos en punto de cruz que bordó la madre! y el piano de Federico con el que Falla amenizaba las funciones de guiñol que Federico organizaba para entretener a su hermana Isabel y a sus sobrinos...

Aquí, en su habitación, escribió, El romancero gitano, El público, Así que pasen cinco años, Bodas de sangre, Yerma y Doña Rosita la soltera...En una de las visitas que he realizado a la Huerta un guía nos contó que Lorca finalizó aquí Bodas de sangre mientras oía, alternativa e incansablemente, en el gramófono, las Cantatas de Bach y a Tomás Pavón (hermano de la Niña de los Peines)...
Y se conserva como estaba... con la luz entrando a raudales por su balcón abierto...Como él lo dejó dicho:

Si muero,
dejad el balcón abierto.
El niño come naranjas.
(Desde mi balcón lo veo.)
El segador siega el trigo.
(Desde mi balcón lo siento.)
¡Si muero,
dejad el balcón abierto!

El 14 de Julio de 1936, Federico volvió a Granada desde Madrid... el 18 era San Federico, el santo de su padre y el suyo y no quiere perderse la celebración familiar en la casa de la Acera del Casino 3. El 19 se van a la Huerta y el 9 de agosto salió de ella para no volver jamás. El 19 de ese mismo mes fue asesinado.

La Casa-Museo fue abierta al público en 1995.



Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

sábado, 16 de julio de 2011

Casas mágicas: La Casa de José Zorrilla

La Casa de José Zorrilla en Valladolid



En septiembre del pasado año estuve un solo día en Valladolid pero pude ver varios de los tesoros artísticos que guarda y sabe mostrar esta ciudad... Así tuve ocasión de visitar la Casa de José Zorrilla y hacer una encantadora visita guiada a la misma...Ahora lógicamente le dedico más espacio en esta serie de las Casas Mágicas...y lo primero es copiar el primer párrafo del oportuno folleto-guía editado por el ayuntamiento: 


"Hay rincones en la ciudad que claman por ser descubiertos o, cuando menos, redescubiertos. Son rincones que guardan el eco de un tiempo en el que fueron el escenario de momentos irrepetibles de nuestro pasado, de nuestra intrahistoria. En la antigua calle de la Ceniza - hoy calle de Fray Luis de Granada - sobrevive uno de esos rincones, la que fuera casa natal y hogar de nuestro poeta más universal: José Zorrilla.

La Casa de José Zorrilla pedía a gritos que volviésemos a contar con ella como lugar de culto literario, como espacio irreductible al servicio de las letras, como territorio en el que la magia de la poesía se manifiesta impunemente"

No puedo dejar de pensar que esto deberían leerlo en nuestro madrileño ayuntamiento y aplicárselo a las Casas de Vicente Aleixandre y de José Padilla...y de tantas otras que seguramente están en las mismas circunstancias y que yo ignoro...

pinchar para ampliar  

Pero ahora sigo con la casa donde nació el 21 de febrero de 1817 un niño sietemesino que cuando creció, y pese al empeño de su rígido padre para que cursara la carrera de leyes y no se dedicara a las letras, supo defender su vocación de amor a la poesía y al teatro...y para ello huyó a Madrid con 20 años dispuesto a triunfar...cosa que en un principio no parecía posible teniendo que superar muchas adversidades... 
 
El guía nos comentó que José Zorrilla murió en Madrid mientras escribía sentado en este sillón y ante este escritorio. Ambas cosas fueron aquí trasladados con todos sus recuerdos

Hasta que la inesperada muerte de su admirado Larra y el emotivo soneto que compuso para la ocasión y que recitó conmovido en el cementerio de Fuencarral, en medio del silencio de una gran multitud, un 13 de febrero de 1837,
le introdujo, de golpe, con todos los honores, en los ambientes literarios de la capital.

Tanto impactó que un joven desconocido, de veinte años, recitara a la muerte de otro joven, de veintisiete...  
Ese vago clamor que rasga el viento
es la voz funeral de una campana;
vano remedo del postrer lamento
de un cadáver sombrío y macilento

que en sucio polvo dormirá mañana. 



Jardín de la Casa de José Zorrilla
José Zorrilla fue muy afortunado al poder dedicarse a lo que tanto amaba y triunfar en su vocación literaria...pero en lo demás la suerte no le sonrió demasiado...En primer lugar la relación con su padre fue siempre tormentosa y ni siquiera en su lecho de muerte le perdonó su desobediencia y su huida a Madrid, lo cual le causó grandes pesares... Tampoco en amores le fue propicia la fortuna; su primer matrimonio a los 22 años fue un completo fracaso e ignoro si logró mucha felicidad cuando a los 52 se casó con Juana Pacheco, treinta y dos años más joven que él ...Y otra desgracia le persiguió toda la vida: la penuria económica, que ni los éxitos ni los reconocimientos oficiales lograron paliar.

Tras varios años de enfermedad y ser operado de un tumor cerebral falleció a los 76 años, en Madrid, en la calle Santa Teresa esquina a Hortaleza, y su cuerpo fue velado en la Real Academia Española en la que ocupaba el sillón L desde 1882 (el discurso de toma de posesión fue íntegramente escrito en endecasílabos...).
 

Tras una despedida multitudinaria, y según su explícito deseo, su cuerpo fue trasladado a su amada ciudad de Valladolid.

Según sus propias palabras:
Para mí es Valladolid
el jardín de mi niñez;
de mi juventud la lid,

el hogar de mi vejez 


 

Al visitar la casa me sorprendió ver sobre uno de los muebles una fotografía del desdichado emperador de México, Maximiliano I... pero es que yo desconocía que Zorrilla vivió una temporada en México y mantuvo una estrecha relación con el infortunado y efímero emperador, que le nombró su "lector" y, más tarde, director del Teatro Nacional. Una vez en España, en 1886, cuando se enteró de su fusilamiento al año siguiente sufrió un enrome disgusto y escribió una obra titulada "El drama del alma" sobre estos hechos. 
  Muchas son sus obras teatrales famosas, pero ninguna como "Don Juan Tenorio"... Por Todos los Santos y el Día de Difuntos es tradición que Don Juan, desde 1844 fecha en la que fue estrenada la obra, vuelva a escandalizar en la Hosteria del laurel, y otra vez enamore a la dulce novicia Doña Inés y otra vez rete al mundo y al cielo, e invite a cenar a los muertos y, finalmente, sea salvado por el amor de su "Doña Inés del alma mía"...

En Alcalá de Henares, por ejemplo, una gran multitud sigue, al aire libre y con gran silencio, todos los años la aventura como si fuera la primera vez que la oye y no supiera que va a pasar al final...



Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

sábado, 9 de julio de 2011

Casas mágicas: La Casa del Maestro Padilla

LA CASA-MUSEO DE JOSE PADILLA 


 
Inicié este serie de las casas "mágicas", que para mi son aquellas en las que alienta el espíritu de alguien que contribuyó a embellecer el mundo con su arte, pensando, ingenua de mi, que el abandono que sufría la de Vicente Aleixandre en Madrid era un excepción...

Hoy, en una agradable mañana de sábado veraniego, con una grata temperatura, me he ido calle Jorge Juan abajo hasta la Colonia Iturbe, junto al Parque de la Fuente del Berro, para visitar una Casa-Museo que tuve la suerte de conocer en el año 2002, décimo aniversario de su inauguración, (por S.A.R. la Infanta Cristina, el Alcalde de Madrid y la representación de la UNESCO) y que me dejó muy buen recuerdo.

Se trata de la Casa en la que, según consta en una lápida de su fachada, vivió y murió el Maestro Padilla (1889-1960), gran compositor que dejó una obra musical que La UNESCO el 22 de junio de 1989 declaró de Interés Internacional.
El año pasado leí en un artículo de prensa la grave situación económica por la que atravesaba la citada Casa-Museo pero creí - otra vez ingenuamente - que no se iba a permitir que dicho Museo desapareciese...

Pero hoy he comprobado la cruda realidad

 


Sobre la lápida de la Sociedad General de Autores, rememorando a José Padilla, el cartel de "Vende" es la evidencia de un despojo a nuestro patrimonio cultural ... Y me he planteado enseguida varias preguntas... ¿Donde ha quedado todo su rico Patrimonio interior? ¿Los derechos de Autor que habrá generado un músico que compuso melodías tan famosas como "Valencia" o "El Relicario" no han bastado para poder mantener un sencillo chalet de dos plantas con un pequeño jardín...? ¿O es que estos derechos no son tan elevados como se dice? ¿O es que no han tenido acceso a ellos sus herederos? ¿O es que éstos no han sabido administrarlos debidamente? ¿O...? Y, en cualquier caso ¿SI los herederos no sabían o no podían no ha habido ninguna Entidad, dígase Ayuntamiento de Madrid, Comunidad, Ministerio de Cultura, Sociedad General de Autores, o entidades privadas que remediasen esa situación?...


Siento una gran tristeza al ver esta casa blanca y tranquila tan cerrada y sola y al llegar a casa busco el folleto que me entregaron en una de las visitas; en la introducción del Alcalde Álvarez del Manzano leo:
 


"La sensibilidad musical de José Padilla, está presente en esta casa. Tiene mucho de evocador y cualquier detalle nos devuelve a ese tiempo que fue compañero inseparable del Maestro. Entremos en esta casa con la devoción que inspira el recuerdo y los acordes imborrables de su música"

José Padilla viajó incansablemente y vivió en muchas ciudades del mundo, especialmente en Buenos Aires y en París, y cómo no en Almería donde nació, pero este chalet de la calle Gabriel Abreu nº 11 de Madrid fue su última residencia y el último lugar donde compuso algunas de sus más bellas melodías. En 1949, cuando tenía 60 años regresó a Madrid para el estreno de "La hechicera en Palacio" y ocupó esta deliciosa casa. 

 


Sus melodías más famosas están evocadas de muchas formas en el interior de la casa, con las partituras especialmente y con los instrumentos musicales, entre ellos el magnífico piano de cola francés marca Pleyel, con los vistosos carteles publicitarios de los estrenos, y con numerosos testimonios escritos en la prensa, y cartas personales de muchas y muy variadas personalidades de todo el mundo.

Su relación con Madrid no fue sólo la de su presencia en esta Casa sino que él vino a Madrid cuando tenía 15 años y aquí terminó sus estudios de Música y fundó en 1907 la primera Tuna del Conservatorio, que en realidad era una orquesta de ochenta estudiantes; y en la capital estrenó sus primeras canciones y sus primeras zarzuelas, en los teatros Barbieri, Apolo, Centro, Metropolitano... 

 


Y a Madrid dedicó "La Violetera", en una de sus estancias admirado del perfume de estas flores que inundaba la calle de Alcalá...Esta canción dio la vuelta al mundo y fue la música de fondo de películas tan diversas como "Luces de la ciudad" de Chaplin en 1931, o "Esencia de Mujer" que fue el primer Oscar de Al Pacino... Y qué decir el "El Relicario"
(evocadora de las fiestas que por San Eugenio se celebraban en El Pardo) que se puso de moda en el París de los años veinte y de la que que Rodolfo Valentino, el mito del cine mudo, dijo que "El Relicario es la más bella canción de amor" y dejó una grabación de ella con su propia voz.

Otras canciones que dedicó a Madrid son "La estudiantina madrileña", "Bajo el cielo de Madrid", Farolillo verbenero", "Madrileña"...

Y la apoteosis de "Valencia" una pieza que formaba parte de la Zarzuela "La bien amada" y que triunfó de forma inmediata en el Teatro Olympia de París y de la que se hicieron, tan sólo en Alemania veintidós millones de discos...

Otra prueba de su universalidad es la melodía de "Ca c`est París" de la que se dice que "Cuando se pronuncia el nombre de París, inmediatamente todas las orquestas del mundo la tocan"... En la célebre película "Ninochka (1939) de Ernst Lubitsch, cuando Greta Garbo vuelve a Moscú y recuerda París con sus camaradas... todos entonan "Esto es París"...

Pero nada de ello ha sido suficiente mérito para que Madrid haya evitado dejar abandonada a su triste suerte esta Casa que estuvo rodeada de música...como la de Aleixandre lo fue de poesía...En este último caso sólo queda el nombre de una calle y en el de Padilla un pequeño jardín en el Distrito de la Arganzuela...¡¡bien poca cosa para quienes nos han honrado tanto!! 

 
Esta fotografía ha sido amablemente cedida por Mercedes Gómez, autora del blog ArtedeMadrid cuyo post sobre la casa de Vicente Aleixandre ha inspirado esta sección de "Casas-mágicas"

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.